A día de hoy la Generación Z sigue siendo el ojito derecho de las marcas, que no quitan ojo a esta cohorte demográfica. Sin embargo, la generación que viene inmediatamente después, la Generación Alfa, promete ser también una auténtica mina de oro para las marcas.
En todo el mundo hay alrededor de 2.000 millones de consumidores adscritos a la Generación Alfa, cuyo impacto económico llegará previsiblemente a los 5,46 billones de dólares en 2029, de acuerdo con un reciente informe de Acceleration Community of Companies (ACC) y la Universidad del Sur de California (USC) Annenberg.
Los consumidores de más edad en este segmento demográfico tienen 15 años, por lo que la Generación Alfa ganará previsiblemente muchísimo protagonismo entre los anunciantes en los años venideros.
Sin embargo, para atrapar la atención de la Generación Alfa, las marcas necesitan comprender antes las dinámicas de consumo de esta cohorte demográfica y conocer exactamente qué esperan por parte de los anunciantes.
Por lo pronto la Generación Alfa tiene muchísimo peso en el consumo de sus familias y sus opiniones se escuchan con suma atención a la hora de decidir qué comer, dónde ir de vacaciones o qué coche comprar.
Nacidos entre 2010 y 2024, los jóvenes de la Generación Alfa influyen en muchos sentidos en las finanzas familiares. Y uno de cada cuatro padres da acceso, por ejemplo, a sus hijos a sus tarjetas de crédito y de débito.
El 70% de los consumidores de la Generación Alfa dice además ayudar a sus familias a estar al tanto de las últimas tendencias y el 76% asegura que sus familiares valoran sus opiniones en relación con los productos que van a arrojarse a la postre en el carrito de la compra.
La Generación Alfa tiene una gran influencia en el consumo dentro de su núcleo familiar
La influencia de la Generación Alfa no se detiene aquí ni mucho menos. El 62% de los consumidores de este segmento dicen ayudar a sus familias a decidir qué series o qué películas ver. El 59% ayuda igualmente a su padres a elegir determinados platos y alimentos, mientras que el 36% desempeña un papel importante en la compra de «gadgets» tecnológicos.
El 54% de la Generación Alfa aconseja de manera similar a sus familias en actividades emparentadas con el ocio y el 11% hace oír asimismo su voz en las compras que implican un gran desembolso de dinero (un coche, por ejemplo).
Además, la inmensa mayoría de la Generación Alfa (el 96%) se ufana de convencer a sus familias a probar cosas de las que han oído hablar en internet o a través de sus amigos.
Conviene, por otra parte, hacer notar que el acceso a internet y la creciente influencia de la Generación Alfa en el consumo en el hogar está promoviendo la «adultificación» de los más pequeños de la casa. Quizás por esta razón el 39% de los consumidores de la Generación Alfa cree que la mayor parte de las marcas y los productos dirigidos a su grupo demográfico son demasiado «infantiles». Y al 36% le gustaría que marcas especialmente enfocadas al público infantil forjaran alianzas con marcas para adultos.
En tanto en cuanto la Generación Alfa se ha criado a los pechos de un mundo donde una vasta miríada de «feeds» y dispositivos pugnan por arrebatar su atención, este grupo demográfico busca la gratificación instantánea en su relación con las marcas. Al 76% le agradaría, no en vano, que las marcas gamificaran la experiencia de usuario apoyándose en recompensas, puntos e insignias. Y el 84% confiesa haber seguido utilizando una app, un juego o un programa de fidelización única y exclusivamente para no perder eventualmente recompensas asociadas.
Por otra parte, la Generación Alfa siente predilección por las sorpresas a la hora de compra y no le gusta seguir necesariamente siempre la misma senda en sus sesiones de «shopping». El 46% considera que es en términos generales más divertido explorar y hallar productos por sorpresa cuando compra o juega online. Este dato pone de relieve a que la Generación Alfa no muestra el mismo grado de lealtad a las marcas que las generaciones precedentes. Y por esta razón, si las marcas desean ganarse su atención, van a tener que pelear activamente por ella.














