Las necesitadas vacaciones han finalizado para muchas personas, y no es fácil incorporarse al trabajo, pasar de la relajación a la exigencia laboral y volver a la rutina con todas las ganas que uno quisiera…
¿Te suena? Sensación de cansancio, falta de energía, apatía, cierta melancolía…
Retomar el ritmo requiere algunos ajustes, y he pensado que sería buena idea compartir contigo algunas claves que te ayudarán a restablecer la salud y comenzar “la vuelta al cole” con más vitalidad.
1. Vuelve a la rutina
Recuperar la rutina y los hábitos saludables es fundamental para recuperar la energía. Las personas que tienen buenas rutinas tienen menos estrés, tienen una mayor sensación de control sobre su vida y su tiempo. Una buena rutina ayuda a reducir la ansiedad, el cansancio y mejora la salud.
Entre esas rutinas, te recomiendo muchísimo que cuides tu hábitos alimenticios.
2. Haz ejercicio, actívate.
Hacer ejercicio es fundamental para elevar los niveles de vitalidad y energía. Y es que la calidad de nuestros pensamientos depende de nuestro nivel de energía. Cuando estamos más cansados todo se nos hace un mundo y tenemos una mayor tendencia a ser más pesimistas.
Sin embargo, cuando hacemos ejercicio recuperamos la energía, nos sentimos con más confianza, somos más positivos, nos sentimos más capaces de hacer que las cosas pasen y de cumplir nuestros objetivos.
3. Ponte al día, pon orden
La vuelta al trabajo después de un periodo de descanso puede resultar abrumadora. Puedes encontrarte con una gran carga de trabajo y un caos. Date un día de recuperación para ponerte al día, ordena tus tareas en importancia y prioridad.
Una clave que marca la diferencia es hacer primero la tarea más difícil, esa que quieres evitar. Si haces esa tarea que más te agobia, sentirás un chute de confianza y motivación, será un alivio. Te prometo que el resto será mucho más fácil y estarás en control.
4. Define tus objetivos
Una de las claves para recuperar la energía y el orden mental es ponerse objetivos claros. Nuestra mente necesita claridad, así que planifica tu agenda, tu tiempo, define tus metas y prioridades.
Y es que el mundo entero está constantemente tratando de desviar y robarnos la atención. Si no tienes un plan (que te aportará una sensación de dirección y propósito), el resto del mundo tendrá un plan para ti.
Reduce al máximo la dispersión. En la actualidad es el gran enemigo.
5. Date tiempo de calidad e invierte en ti
Más que nunca, el gran reto es mantener una buena salud mental; tener una charla interior más positiva, no una voz que te frene y te haga dudar, sino una mente que te ayude, que sea tu socio, que te aporte confianza.
Para ello necesitamos adquirir hábitos más positivos: reciclarnos, aprender, invertir tiempo en nuestro desarrollo personal, encontrar un mayor equilibrio en nuestra vida.
Entre esos hábitos también está leer, meditar, hacer algún curso y todo aquello que te ayude a evolucionar, lo cual nos aporta un mayor potencial, más oportunidades y una mejor vida.
Espero que algunos de estos pasos te ayuden a recuperar y crear la mejor versión de ti y mirar al futuro con más confianza y una mayor sensación de propósito.
Te envío un fortísimo abrazo ¡y seguimos en contacto!