Cada vez son más las empresas que se sienten atraídas por este tipo de servicios y nuevos modelos de negocio por razones económicas y de flexibilidad. Los modelos as a Service, ‘aaS’ permiten elegir al proveedor de soluciones que necesitan en el momento preciso. En torno a este concepto surgen cada vez más modelos de negocio.
SaaS: Software as a Service
Son los as a Service más conocidos. Como su propio nombre indica un modelo de negocio SaaS o ‘Software as a Service’ consiste en un tipo de empresa que ofrece un servicio a su cliente que se da a través de software, en la mayoría de los casos a través de la nube
Con este modelo los clientes no necesitan comprar licencias ni instalar programas en sus dispositivos ni hacer desarrollos propios, basta con alquilar a un tercero el software que necesitas y pagar por su uso puesto que la forma más habitual que tienen estos negocios de monetizar es con un modelo de suscripción, modalidad que suele procurar ingresos recurrentes.
Ejemplos de empresas SaaS hay muchos aunque los típicos a los que suele recurrirse son WordPress, que permite al usuario gestionar el contenido de tu blog o página web y personalizarlo haciendo uso de las opciones y los plug-ins que integra la plataforma, o Google Cloud, la nube de Google que ofrece servicios seguros, flexibles y rentables, además permite ahorrar costes de tecnología y escala paralelamente con la compañía.
XaaS (Todo como servicio)
El X as a Service se puede traducir como ‘cualquier cosa como servicio’, es decir que todo recurso o actividad tecnológica puede contratarse en formato de servicio y acceder a él mediante la nube. Se refiere pues a una categoría general de servicios relacionados con la computación en la nube y el acceso remoto.
Dentro de esta categoría general surgen multitud de subcategorías con gran número de productos, herramientas y tecnologías que se ofrecen a los usuarios como un servicio a través de Internet de manera que este concepto podría ser el paraguas de todos los modelos que se incluye en este artículo pero también de muchos otros que se apropian del as a service.
Como ejemplos pueden citarse: las API as a Service (AaaS), por ejemplo, Google API Discovery Service; la inteligencia artificial as a Service (AIaaS), por ejemplo IBM Watson o la propia Open ai; CaaS o ‘Content as a Service’ que permite el almacenamiento, gestión y administración de contenido en la nube, por ejemplo, Instagram; o DBaaS o ‘DataBase as a Service’, que posibilita el almacenamiento de bases datos en la nube de forma segura y escalable.
IaaS (Infraestructura como servicio)
Se trata de virtualizar los componentes de hardware que dependían tradicionalmente de los equipos físicos on-premise, como pueden ser los servidores y sistemas de almacenamiento, sistemas de seguridad y firewalls de red o centros de datos, entre otros. Estos recursos de infraestructura en la nube se consumen y se pagan bajo demanda.
A diferencia de otros modelos ‘como servicio’, como el SaaS o el PaaS, los modelos de infraestructura como servicio ofrecen una grado de gestión. Aquí, el proveedor de servicios aloja, mantiene y actualiza la infraestructura de backend, como la computación, el almacenamiento, las redes y la virtualización. El cliente gestionas todo lo demás, incluido el sistema operativo, el middleware, los datos y las aplicaciones.
PaaS (Plataforma como servicio)
Según definición de Salesforce, “la plataforma como servicio o PaaS es un conjunto de servicios basados en la nube que permite a los desarrolladores y usuarios empresariales crear aplicaciones a una velocidad que las soluciones en las instalaciones no pueden alcanzar”.
Al tratarse de un servicio basado en la nube, no hay necesidad de preocuparse por la configuración y el mantenimiento de servidores, parches, actualizaciones y autenticaciones, entre muchas otras tareas: los usuarios pueden centrarse en crear la mejor experiencia de usuario posible.
La PaaS ofrece también un conjunto de servicios adicionales tales como herramientas de diseño y flujo de trabajo, y API completas, diseñados para ayudar a los desarrolladores y usuarios empresariales a crear aplicaciones que harán las delicias de sus usuarios.
Una PaaS es una solución empaquetada lista para ayudarle a desarrollar y desplegar tu aplicación, mientras que una IaaS es solo la infraestructura básica de la nube.
Por lo demás, hay quien distingue entre tres tipos principales de PaaS: pública, privada e híbrida. Con el PaaS público la plataforma es la misma para todas las empresas que la usan y el sitio de almacén también es público; el PaaS privado cumple con mayores exigencias al enfocarse más en la seguridad y al ofrecer más control sobre las aplicaciones. Asimismo, el entorno empresarial también se puede personalizar aún más. En la PaaS híbrida, se permite construir la infraestructura interna para hacer un porcentaje establecido personalizaciones.
DRaaS: Disaster recovery as a Service
Se basa en la recuperación de desastres como servicio. Un modelo en el que mientras los datos se envían a través de la nube, el proveedor envía los datos a un servidor para evitar cualquier adversidad. Las empresas lo utilizan como un plan de recuperación de desastres. El DRaaS permite a las organizaciones almacenar copias de seguridad de los datos y de la infraestructura de TI en entornos de informática de nube de terceros.
El DRaaS permite acortar tiempos de recuperación tras sufrir un incidente que pueda afectar a la infraestructura física o virtual de la empresa. El DRaaS, por tanto, es mucho más que una copia de seguridad, ya que permite a una empresa poder seguir operando tras sufrir un incidente debido a causas como ataques informáticos, errores del hardware o el software, caída de los centros de proceso de datos, cortes de luz, etc.