La venta es la esencia de todo negocio digital y tienes que aprender a sentirte cómodo y encontrar tu forma de llevarla adelante.
Categoría: Técnicas de Ventas
Hoy quiero compartir contigo algunas estrategias y ejemplos que me han funcionado y que enseñamos en nuestros programas
Si tienes varios productos similares dentro de una misma categoría, vigila que los precios no se disparen entre sí sin razón
Para transmitir esa rareza con el precio, sube el precio por encima de tu competencia para ganar esa batalla en “valor percibido“
La propuesta de valor es el eje de cualquier estrategia de precios. No se trata de competir por precio, sino en valor.
El precio siempre es relativo y depende del perfil del cliente y la situación. Lo que es costoso para una persona puede ser accesible o hasta barato para otra.
Un poco de empatía no está nada mal. No te aproveches de la necesidad de tu cliente, de su dolor, de su desespero o, quizás, de su falta de conocimiento. T
Después de este análisis pueden surgir varias preguntas: ¿está entregando más de lo que está recibiendo?, ¿está sobre estimando el impacto del volumen y sub estimando el impacto del descuento?
Desligarse de los prejuicios personales y comprender las necesidades e intereses del cliente es el camino para demostrar confianza y seguridad en la venta.
Esto es un ejemplo muy básico, pero vamos con un cliente para una agencia de marketing online. Imagina que quieres conseguir que ese lead agende una reunión de ventas para hacerle una propuesta.
Cuando un vendedor no está completamente seguro de la superioridad de lo que ofrece frente a la competencia, se siente incómodo al cobrar un precio que considera elevado. E
El proceso de establecer el precio ideal no es una ciencia exacta y muchas veces implica prueba y error. Sin embargo, no se trata de seguir ciegamente a la competencia.
No necesitas una audiencia gigantesca para tener éxito. Las ventas orgánicas crecen cada día más, y tú puedes aprovechar esto a tu favor.
El rechazo es algo inevitable, pero es una oportunidad de aprendizaje. Cada «no» que recibimos nos permite reflexionar y mejorar. En vez de verlo como un fracaso, debemos entenderlo como una parte esencial del proceso para crecer.
El reloj de arena de marketing ofrece un marco de referencia para entender y mejorar no solo el recorrido del cliente sino el proceso de ventas en sí.