Nunca empieces las presentaciones de trabajo diciendo «hola»: cómo ser más interesante en las reuniones

Seguro que has asistido a un montón de presentaciones en las que el presentador empieza con un saludo de cortesía tipo «Hola, gracias por recibirme hoy aquí» o «Me alegro mucho de estar aquí», a menudo seguido de su nombre y su currículum profesional. A veces, si se trata de una reunión interna, se dan los mismos saludos seguidos de una diapositiva con el orden del día, con viñetas y la narración del presentador.

Como coach de oratoria, que ha trabajado con muchos ejecutivos y equipos directivos, sé cómo hacer que las presentaciones de trabajo sean más atractivas.

He aquí cómo deberías cambiar tu enfoque.

Si te ciñes a tus viejas costumbres, no vas a dejar una primera impresión memorable

Cuando entras en una sala de conferencias o en un escenario, tu público piensa tres cosas: ¿Quién es esta persona, por qué debería importarme, y cómo va a resolver mi problema?

Reconozcámoslo: la mayoría de la gente está más interesada en cómo vas a resolver su problema que en ti y en tu currículum profesional. Así que cambiemos un poco el guion. Empieza con la solución a su problema, habla brevemente de ti para dar credibilidad y, a continuación, dales una razón para que se interesen por ti.

En vez de eso, intenta captar su atención

Comienza tu presentación con un gancho o una historia, algo que capte su atención desde el principio. Por ejemplo, tu gancho podría ser: «¿Sabías esto?», o «¿Y si esto?». También puede ser una breve historia que humanice tus servicios o productos.

La mayoría de las presentaciones son predecibles; ¿no sería mejor, tanto para tu tiempo como para el del público, introducir un elemento sorpresa?

A algunos les puede parecer descortés no dar las gracias al organizador o saludar al público, así que te sugiero que encuentres otro momento en tu presentación para hacerlo. He aquí una buena estructura:

Introducción: «¿Y si pudieras ser un presentador más seguro y creíble? ¿Y si pudieras interactuar con el público para que recuerde tus productos o servicios?».

Credibilidad: «Me llamo Meredith y llevo más de una década asesorando a empresarios y ejecutivos sobre cómo hablar con chispa, y estoy muy contenta de estar aquí. Quiero dar las gracias a [insertar nombre] por invitarme a compartir la tarde con vosotros.»

Solución: «Hoy te enseñaré tres formas de hacer que el público recuerde tus productos y servicios, ayudándoles a destacar en un mercado competitivo. Que empiece la fiesta».

También puedes intentar establecer una conexión personal

A menudo, las presentaciones carecen de ese toque personal. Prueba a compartir una anécdota o experiencia personal relevante relacionada con ese tema.

Esto no solo hará que tu presentación de trabajo sea más cercana, sino que también ayudará a establecer una conexión más profunda con tu audiencia.

Por ejemplo, puedes decir: «Cuando era más joven, a menudo me escondía en el fondo de la clase, esperando que el profesor no me llamara porque no quería parecer tonto o contestar mal. Más tarde incorporé a mi vida la interpretación y la improvisación. Gracias a la práctica de estas dos formas de arte desarrollé mi confianza y aprendí a relacionarme con los demás con más valentía. Hoy te daré las claves para que tú también puedas enganchar mejor a tu público».

Intenta fomentar la interacción

Como mínimo, tienes que intentar implicar a tu audiencia desde el principio, ya sea en persona o en llamada virtual. Puedes hacer una pregunta que invite a la reflexión o proponer un reto que les implique directamente. Este enfoque cambia la dinámica de las sesiones y las hace más interactivas y atractivas.

Si pones en práctica alguna de estas sugerencias, conseguirás que tu presentación sea memorable e impactante de inmediato. Y lo más probable es que rentabilices más tu inversión de tiempo y energía.

En el vertiginoso mundo en que vivimos, donde la capacidad de atención es cada vez menor, es fundamental captar y mantener la atención del público desde el principio. De este modo, prepararás el terreno para una interacción más atractiva y productiva.

Desafíate a ti mismo a romper con las normas de presentación, adopta un estilo que seduzca a tu audiencia y deja una impresión duradera.

Meredith Grundei,

Deja una respuesta