Tartas de Julita, una pequeña marca de repostería artesanal fundada en Alicante por Julia Sala ha cerrado los nueve primeros meses de 2025 con un crecimiento de nada menos que el 120% respecto al año anterior.
Este obrador tiene poco más de dos años de vida, pero su facturación no para de aumentar y ya tiene firmados varios contratos para franquiciar la marca. A 30 de septiembre, la empresa alcanzó una facturación más de 2,2 millones de euros, el doble que el año anterior, consolidándose como uno de los negocios emprendedores de repostería con mayor crecimiento del país.
Según explican los fundadores, este impulso se sostiene en un modelo de negocio basado en la calidad del producto, la innovación constante en sus recetas y un desarrollo de marca que combina estética, experiencia de compra y profesionalización.
La empresa cuenta actualmente con seis puntos de venta activos y un equipo de 40 trabajadores, fruto de un crecimiento orgánico mantenido durante los últimos dos años.
El siguiente hito será la puesta en marcha de su red de franquicias, con la que busca escalar su presencia nacional, sin renunciar a la artesanía ni a la identidad que caracteriza a la marca. A día de hoy la marca ya tendría siete licencias de franquicia firmadas o en fase de negociación final, en Valencia (Colón y Ruzafa), Alcalá de Henares, Granada, Málaga, La Zenia (Orihuela) y Barcelona, además de nuevas solicitudes procedentes de Salamanca, Valladolid, Cartagena, Bilbao y Córdoba.
Un «nuevo concepto» de pastelería artesanal que también se basa en las redes sociales
Más allá de sus cifras, Tartas de Julita representa, según la propia empresa, un «nuevo concepto» de pastelería artesanal en España. Se trata de un modelo que aúna producto, estética y emoción. Su posicionamiento parte de una experiencia de compra cuidada, una identidad visual reconocible y una elaboración diaria con ingredientes de primera calidad.
El crecimiento de la marca también ha ido acompañado de la evolución de su comunidad digital. Con más de 84.000 seguidores en Instagram, Julia Sala ha logrado convertir su día a día entre hornos, recetas y creatividad en una narrativa cercana y aspiracional que muchas personas siguen con entusiasmo.
Su autenticidad la ha posicionado como una de las creadoras de contenido de repostería más influyentes del país, capaz de transformar su pasión en un movimiento que combina un número elevado de ventas, una experiencia muy satisfactoria a la hora de visitar sus espacios gastronómicos y un éxito rotundo en el sabor de las tartas.
Con una estructura sólida, una marca en expansión y una red de franquicias a punto de desplegarse, Las Tartas de Julita se prepara ahora para una nueva etapa de crecimiento que busca llevar su propuesta artesanal a todos los rincones de España.














