Son económicos, accesibles y de fácil lectura, pero el abuso de correos electrónicos recibidos puede generar rechazo entre los suscriptores. Incluso cuando han dado el visto bueno para recibir esos envíos, las empresas han de saber dónde está el límite. Hay quien habla de tres correos electrónicos a la semana, otrosSeguir leyendo >>>